Neuralgia del trigémino. Tratamiento con Terapia Neural

01.02.2017

A continuación os presentamos un artículo que recoge información sobre la siguiente patología: "La neuralgia del trigémino", también llamada tic doloroso, es una afección que presenta dolor facial intenso, similar a un calambrazo eléctrico, debido a la afectación del nervio trigémino, uno de los nervios más largos de la cabeza y responsable de llevar la sensibilidad de tacto y de dolor desde la cara hasta el cerebro.El nervio trigémino es el quinto de los 12 pares de nervios craneales que se originan en la base del cerebro y esta formado por tres ramas:

  • La rama superior (oftálmica) que lleva la sensibilidad del cuero cabelludo y la parte frontal de la cabeza
  • La rama media (maxilar) que pasa por la mejilla, la nariz y el labio superior
  • La rama inferior (mandibular) que pasa por el labio inferior.                                              En el trastorno pueden verse afectadas más de una de ellas.

¿Quién se ve afectado?

La neuralgia del trigémino puede producirse a cualquier edad pero el 70% de pacientes son mayores de 50 años. El pico máximo de incidencia está entre los 50 y 60 años.

La prevalencia de la enfermedad (proporción de casos en la población) va aumentando a partir de esta edad y se diagnostica más en mujeres que en hombres posiblemente por la mayor expectativa de vida del sexo femenino. Algunos autores consideran la dolencia como uno de los achaques del envejecimiento.Es probable que exista una predisposición genética hereditaria en ciertos grupos familiares de padecer la dolencia pero no está claramente evidenciado todavía. Se trata de  una dolencia con causas difíciles de encontrar.  De encontrarse una, lo más común es que se produzca porque un vaso sanguíneo comprime al nervio trigémino cuando este sale del tallo cerebral, o con mucha menor frecuencia, por la compresión local de un tumor extracerebral.

Enfermos de esclerosis múltiple pueden presentar la misma sintomatología si debido a la degeneración nerviosa de la enfermedad se afecta también el nervio trigémino.

Síntomas

Se caracteriza por un dolor facial súbito e intenso, semejante a un shock eléctrico, que puede durar desde unos segundos hasta minutos con sensación de calambrazos punzantes alrededor del ojo, la mejilla y la parte baja de la cara, afectando por lo general a un solo lado de la cara.

Los episodios dolorosos se pueden desencadenar por actividades cotidianas como cepillarse los dientes, masticar, beber, afeitarse o lavarse la cara, al producirse un estímulo sensorial en la zona del nervio trigémino. Es frecuente que inicialmente se confunda con un problema dental.

El dolor puede producirse en uno u otro lado de la cara pero sólo entre el 1% y el 5% de los casos afecta a ambos lados a la vez y raramente se produce si se está durmiendo.

Los síntomas en forma de ataques pueden repetirse varias veces a lo largo del día y persistir durante semanas. También pueden desaparecer durante meses o años y volver a aparecer sin causa aparente. En los días previos a que comience un episodio, algunos pacientes pueden notar una sensación de cosquilleo o entumecimiento constante.

Con el tiempo, los períodos de remisión tienden a acortarse y los ataques de dolor a menudo se hacen más constantes lo que lleva a algunas personas a evitar realizar ciertas actividades diarias y descuidar la alimentación o la higiene.

Se considera neuralgia del trigémino Tipo 1 si el dolor que se siente es principalmente agudo e intermitente (en forma de shock) y Tipo 2 si el dolor es constante y persistente más del 50% del tiempo.

Aquí os dejamos un artículo escrito en abril de 2015 por del Dr Francisco Javier Martínez Romero, Médico especialista en Traumatología.

"Neuralgia del Trigémino, Terapia Neural y Odontología Neurofocal. 

Se presenta un interesante caso en el que la mejoría de la paciente se consigue atendiendo a muy diferentes aspectos de la persona, incluído el psicológico/emocional. 

Mujer de 59 años con antecedentes personales de histerectomía por prolapso uterino, artroscopia de ambos hombros y exéresis de varices en miembro inferior izquierdo. No HTA ni DM. Alergia a Buscapina. Dos partos por vía vaginal. Boca en mal estado con implantes en casi todo el maxilar superior derecho (arreglo realizado después del debut de su cuadro clínico). Carácter fuerte y emocionalmente muy afectada por problemas con su madre (ya fallecida). 

Acude a Consulta con diagnóstico por Neurología de neuralgia de las ramas II y III del trigémino en lado derecho.

 Debutó 5 años antes con dolor en hemicara derecha con irradiación a nariz y zona dental. Fibroendoscopia ORL, TAC y RMN normales. Ha probado diferentes tratamientos farmacológicos al uso sin grandes resultados. Estaba acudiendo a la Unidad del Dolor donde le hicieron tratamiento con radiofrecuencia en ganglio de Gasser que produjo un efecto parcial y pasajero.

 La exploración clínica no es muy llamativa salvo hiperestesia en territorio de las ramas II y III del trigémino derecho. Cicatriz de histerectomía (Phannenstiel) sensible a la palpación. 

En la primera sesión me limité a hablar de sus problemas y a infiltrar las cicatrices con Procaína, encontrando varias tóxicas en hombros y miembro inferior izquierdo. La paciente se emocionó hasta llorar al infiltarle la cicatriz de la histerectomía. No se insistió más dado el fuerte efecto del tratamiento ese día. 

La paciente notó mejoría y, en especial, dejaron de importarle los problemas que había tenido con su madre, lo que le hacía la vida más llevadera, por lo que en subsiguientes sesiones se insistió en los puntos previos más ombligo y, para incidir más directamente en el trigémino, se añadió infiltración con Procaína a boca y pilares amigdalinos (Huneke), ganglio esfenopalatino y Gasser derechos con mejoría franca que duraba unas 3 semanas. 

Para intentar prolongar el efecto de la terapia dado el buen efecto de la infiltración de la cicatriz de la histerectomía, en sesiones posteriores se infiltró Frankenhauser bilateral y se dio Procaína oral al 1%, 1 ampolla diaria en ayunas durante 10 días. Se consiguió que la paciente tuviera periodos sin sintomatología pero al final el dolor recurría. 

Así pues se decidió añadir infiltración con Procaína al 1% de ganglio estrellado derecho en dos ocasiones más Procaína oral durante 20 días consiguiendo una mejoría sustancial con muchos días sin ninguna medicación analgésica. Pero aún así precisaba consultas cada 6 semanas, por lo que se decidió mirar más de cerca en boca como posible campo interferencial y se pidió una ortopantomografía: Se detectó posible bolsa entre 11 y 12, problemas con raíces 17 y 18, además de la endodoncia en 24. A la exploración, dolor palpatorio por palatino en coronoides derecha y en espejo en maxilar y dolor a la percusión en 34. 

Se procedió al tratamiento neural de estos posibles campos interferenciales, incluyendo coronoides y espejo maxilar, consiguiendo una mejoría sustancial. A la siguiente sesión, el único remanente de dolor se encontraba en heminariz derecha, habiendo remitido el resto del cuadro clínico por completo. Refería el dolor como desde maxilar superior derecho hasta nariz. Se observó una reacción gingival entre 11 y 12. 

Se volvió a tratar boca con muy buenos resultados y se aconsejó acudir al odontólogo para tratar el foco de forma permanente si fuera preciso. La paciente refiere que, además de la gran mejoría de los dolores, agradece mucho la mejoría en su estado emocional pues le ha hecho la vida mucho más llevadera. Queda claro que hay que tratar a la persona en toda su extensión."